SILENCIO, SE RUEDA

TAPUJO.- 3. m. Enredo, asunto turbio.



¡Luces, cámara, acción! El rodaje ha comenzado. Es lógico, para preservar el impacto comercial, que el desarrollo de una película se mantenga en secreto. Por el contrario, no lo es tanto el secretismo que el gobierno español ha impuesto a las "negociaciones" con los terroristas de ETA. Si de algo pecan los socialistas españoles es de excesivos secretos. El PSOE siempre se ha movido entre las luces y las sombras; aunque más en la penumbra que bajo el sol. La práctica totalidad de los medios de comunicación españoles se han añadido a la comparsa de mudos, ciegos y sordos; convirtiéndose, así, en unos cómplices interesados. ZP ha esquivado, con la habilidad del mediocre, todas las ocasiones que se le han presentado para dar explicaciones. Él, que siempre se llenó la boca con la "libertad de expresión", ahora la repudia. Una vez más, la incoherencia socialista aflora. Hasta la fecha se ha mostrado como un mentiroso compulsivo; sin embargo, no tiene recato alguno en volver a pedir confianza y tranquilidad. ¿Debemos darle crédito al fullero en el casino? No, porque él no juega con su dinero, sino con el nuestro. Toda la tramoya vasca sólo persigue un fin: nuevas elecciones en el momento más propicio para el PSOE. La película que está rodando ZP es mala, deleznable: el guión no lo ha escrito él; los directores cargan a sus espaldas con varios fracasos comerciales; los actores interpretan mal y sin dar credibilidad a sus personajes; y son unos productores ajenos al estudio los que marcan las fechas de rodaje. La expectación entre el público es alta, casi tanto como luego será su decepción. El PSOE, por si acaso, ya busca responsables al fracaso; pero también con una táctica muy cicatera: Si sale bien, el mérito será nuestro; pero si fracasa, el culpable será el PP. En román paladino, eso tan español de "no hay ausente sin culpa ni presente sin disculpa". Y es que el PSOE, en tener la coartada lista, sabe mucho. ¡Silencio!, se rueda un peplum; pero no de romanos, no; de miserables.


TRAMOYA.- 3.m. Enredo dispuesto con ingenio, disimulo y maña.


APOSTILLA.- Ya que esa película no generará muchas fotografías, les sugiero que guarden los periódicos: tendrán la misma utilidad y son el arma principal contra un político; aunque a ellos no les importa.